jueves, junio 02, 2005

Sólo un beso

Cuando Casim y Roisin se conocen, sienten una fuerte atracción y empiezan una relación en secreto. Para ellos, que él sea musulmán y ella católica no supone ningún problema pero las diferencias religiosas y culturales sí lo son, no sólo para la familia de Casim sino también para el entorno católico de Roisin.
 

Unos actores en estado de gracia y un director comprometido que usa hábilmente los recursos poniéndolos al servicio de la máxima "hay que superar la barreras culturales y religiosas en las relaciones personales" consiguen una película combativa, oculta bajo un antifaz de telenovela, que pone el azúcar suficiente para digerir este principio, fácil de enunciar pero amargo de asimilar cuando lo has de tomar.