La casa del lago

Dos personajes viven separados dos años en el tiempo pero tienen en común una casa de cristal construida sobre un lago. El tiempo los separa en el presente, la casa del lago los une en el pasado y el buzón de correo los relaciona con vistas al futuro: romance servido para los unidos por el tiempo que los separa.
 

La fantasía no parece haber encajado con el triángulo romance, drama y comedia. No obstante, la estructura argumental y el planteamiento visual mantienen el pulso, evitan que el interés se diluya y sacan a flote la perspectiva arquitectónica de la relación familiar con la casa del lago como edificado legado.

Tiene algo la casa del lago, sea el juego del tiempo, sea el correo como puente intemporal, sea la casa en el lago como referencia a las construcciones sobre las que se edifican nuestros sentimientos. Lo que seguro no es, es la pareja protagonista.