miércoles, septiembre 01, 2004

Mar adentro

Desde el alto risco de unos hechos reales, conocidos y seguidos por la gran mayoría de nosotros desde la coloreada pantalla de los medios de comunicación, Amenábar se erige en trovador social y plano tras plano sus manos van colocando sobre el tapete de la pantalla de cine las piezas de un rompecabezas social hasta conformar una imagen final emotiva en un ejercicio demostrativo de lo que puede hacerse para contar la historia de un marino cuya vida un día encalla en las arenas de una playa de su Galicia vital: embarrancado pero lúcido y cautivador, ha tomado la decisión de romper el lazo gordiano que lo mantiene varado no sin verse alcanzado por los vertidos contaminantes de quienes acostumbran a limpiar sus conciencias mar adentro.