La casa de las dagas voladoras

Bocadillos variadosComentarios de películas y música en torno a los 800 espacios. Un bocado de opinión para abrir, o saciar, el apetito. | |
El veterano Nichols emplea elipsis temporales que confieren elegancia narrativa, y sugieren que el tiempo no significa nada en absoluto en las relaciones de pareja, los cuatro actores defienden su papel con buenas artes pero la trama no consigue generar la necesaria empatía entre personajes y espectadores (al menos en mi entorno) resultando un balance negativo.
Al igual que un boxeador durante un combate, la película mantiene la guardia en alto mientras va soltando golpes con una mano para, una vez ganada nuestra confianza, dejar ir con la mano perezosa un golpe demoledor que le tumba a uno en la moqueta de la sala y cuando se recobra la consciencia, el cuadrilátero que había en pantalla se ha convertido en una habitación de la que parece imposible salir y que, ¡oh! magia del cine, nos hace sentir como si estuviéramos mar adentro.
Eastwood ha vuelto a confirmar que cada película suya es un valor seguro.